El riesgo más común que existe al realizar trabajos de altura es el de una caída. Para protegerte es necesario utilizar sistemas anticaídas.

Las actividades en altura son consideradas de alto riesgo debido a todos los factores que debemos de revisar para nuestra seguridad. Dentro de los riesgos más comunes podemos encontrar el riesgo de corte, riesgo eléctrico y, el más común, el riesgo de caída.

Al utilizar sistemas anticaídas podemos eliminar dos de los tres factores de una caída: no tendremos una recepción peligrosa (no llegaremos al piso), tendremos amortiguación y sin embargo, una caída siempre será involuntaria.

Un sistema anticaídas nos permite desacelerar una caída hasta quedar estáticos. Lo más importante a considerar en estos sistemas es que deben limitar la fuerza de choque sobre nuestro cuerpo a menos de 6kN fuerza, de manera que evitemos lesiones.

¿Qué debemos considerar en los sistemas anticaídas?

El “Factor de Caída”, es un elemento que debemos tener en cuenta cuando hacemos actividades en alturas. Se calcula como la relación entre el punto de anclaje y el punto de conexión al arnés: entre más alto se encuentre el anclaje, el Factor de Caída se acercará a 0, y conforme más abajo esté, se acercará a 2. Este rango nos va a indicar la severidad de la caída.

En México contamos con la NOM-009-STPS-2011 la cual nos habla de los Trabajos en Altura, es importante poder conocerla para poder cumplir ampliamente con la legislación nacional. Esta Norma nos indica que un trabajo en altura se considera cualquier actividad realizada por encima de 1.80 metros sobre el nivel de referencia, por lo que a partir de esta altura debemos siempre usar un sistema anticaídas.

Recuerda siempre revisar:

  • El Factor de Caída para el qué está diseñado tu sistema.
  • Tener las certificaciones necesarias.
  • Conocer el rango de peso del usuario que admite.
  • El tiempo de vida máximo potencial.
  • Compatibilidad con tu cadena de seguridad.